Los experimento de J.J. Thomson con los tubos de Crookes y la comprobación experimental de que el átomo podía emitir unas partículas cargadas negativamente bajo ciertas condiciones: los electrones, llevaron a Thomson a replantearse el modelo atómico propuesto por Dalton. El átomo no podía ser indivisible. Dalton imaginó el átomo como una masa de carga positiva con los electrones incrustados en su interior
Posteriormente los experimento de Ernest Rutherford y sus colaboradores con la lámina de oro llevaron a plantear otro modelo de átomo, conocido como Modelo Atómico de Rutherford, en el que el átomo se entiende que está prácticamente hueco, con dos partes llamadas núcleo, que contiene casi toda la masa del átomo, y su carga positiva, y la corteza en la que se encuentran los electrones girando alrededor del núcleo.
IMAGEN DEL MODELO ATÓMICO DE RUTHERFORD